NAIROBI – Con los esfuerzos actuales para impulsar la producción de créditos de carbono de África para 2030, los expertos creen que los compromisos requerirán que los gobiernos pasen de un mercado voluntario a uno de cumplimiento generando energía renovable para una parte del suministro de electricidad nacional y regional.
El mercado de cumplimiento en África, según los expertos, es fundamental para que los países fijen un precio del carbono a través de regulaciones para controlar el suministro de derechos de emisión que luego son distribuidos por regímenes nacionales y regionales.
«Se trata de conseguir el modelo de negocio correcto…, la capacidad de los gobiernos africanos es fundamental para tener el tipo adecuado de información e invertir en modelos de negocio locales», dijo a IPS Mahua Acharya, director ejecutivo de C-Quest Capital ( CQC), una de las principales empresas financieras de carbono del mundo.
Actualmente, los líderes africanos están impulsando instrumentos financieros basados en el mercado, como créditos de carbono que pueden generarse mediante proyectos que frenen las emisiones centrándose principalmente en el cambio a fuentes de energía renovables.
La iniciativa del mercado de carbono permite a los contaminadores compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero invirtiendo en desarrollo o iniciativas como la plantación de árboles o energías renovables. Sin embargo, los expertos señalan que es más económico comprarlos en África debido a las malas regulaciones y políticas débiles.
La energía renovable estuvo en el centro de los debates en la primera Cumbre Africana sobre el Clima, celebrada en septiembre en Nairobi, y alejarse de la energía de combustibles fósiles hacia fuentes de energía verde centradas en las personas se considera ahora la forma más eficaz de ampliar la participación del continente en los mercados voluntarios de carbono.
El objetivo de la iniciativa africana es generar 300 millones de nuevos créditos de carbono anualmente para 2030, comparable a la cantidad de créditos emitidos a nivel mundial en mercados voluntarios de compensación de carbono en 2021.
“Este es un objetivo muy ambicioso y una oportunidad fantástica para que África fije el rumbo”, dijo Mahua en una entrevista exclusiva.
El artículo 6 del reglamento del Acuerdo de París que rige los mercados de carbono otorga a los países el derecho a emitir dióxido de carbono a un precio acordado por tonelada, pero uno de los principales desafíos que enfrentan la mayoría de los países africanos es la falta de estrategias apropiadas para ganar dinero en estos mercados de carbono.
El último informe sobre mercados de carbono y financiación climática de la Alianza de África Oriental muestra que Burundi, Etiopía, Kenia, Ruanda, Sudán, Tanzania y Uganda están actualmente ampliando la producción de créditos de carbono a través de planes voluntarios de activación de ese mecanismo.