El Papa aclara definitivamente sus palabras sobre la ‘Gran Rusia’ en el vuelo de regreso de Mongolia
/Hernán Reyes Alcaide, corresponsal en el Vaticano
Como repite desde que fue entronizado pontífice, y aún antes, el papa Francisco volvió hoy a poner de manifiesto su más absoluto rechazo a los imperialismos, una aclaración con la que buscó ya dar por cerrada de manera definitiva la increíble polémica originada por una hermenéutica errada de las cúpulas ucranianas que habían malinterpretado una referencia del pontífice a la innegable producción cultural rusa de antaño.
Además, en una conferencia de prensa en la que abarcó varios de los temas de actualidad al regresar de una Mongolia en la que estuvo 74 horas, el Papa definió al país asiático como “un vecino ubicado entre dos potencias” y reafirmó su “admiración” por el pueblo chino y la “muy buena” herencia cultural rusa.
“Hay imperialismos que buscan imponer su propia ideología”, planteó el pontífice a bordo del vuelo que este lunes lo llevó de regreso a Roma desde Ulán Bator.
“La transmisión de la cultura no es nunca imperialismo, es siempre dialogar”, agregó luego al ser consultado sobre sus declaraciones de fines de agosto en las que puso de ejemplo al período cultural de la época de los emperadores Pedro I y Catalina II que habían generado fuertes críticas del Gobierno ucraniano.
“No pensaba en el imperialismo cuando dije eso”, buscó aclarar el Papa. La semana pasada, el Vaticano ya había precisado a través de una nota que el pontífice no buscaba exaltar a los emperadores sino a la producción cultural de su época.
En ese marco, el Papa aseveró que “hace falta distinguir cuando es la cultura de un pueblo o cuando es la ideología de un filósofo o político de ese pueblo”. Según el pontífice, este peligro se da «incluso en la Iglesia”.
Cuando la ideología toma fuerza y se hace política a menudo se vuelve incapacidad de dialogo, se vuelve dictadura. Esto hacen los imperialismos, que se consolidan con una ideología