El silencio del Tótem (Le silence du Totem, L’Harmattan, abril 2018) es el título de la primera novela de Fatoumata Ngom, senegalesa nacida en Dakar y actualmente residente en Paris. Narra una doble historia, la de la protagonista, Sitoé Iman Diouf, serere senegalesa que, tras haber estudiado en su país y en la Escuela Normal Superior de París, vive felizmente en París con su marido francés y el hijo de ambos; y la de una estatua Pangol (Pangol son los espíritus ancestrales), que en 1870 un misionero, Alexis de Fabrègues, llevó a Francia desde un pueblo serere, Khalambass (existe en Senegal un pueblo con ese nombre, fundado en 1921), al que la estatua protegía, y que terminó, tras diversas peripecias, en el museo de artes y civilizaciones de Quai-Branly. Cuando Sitoé descubre la estatua, se inicia para ambos un viaje de vuelta a su pueblo y a sus tradiciones. Sitoé creció junto a su abuelo, Custodio de los Cultos, y la estatua le hace revivir y añorar las experiencias de su infancia. En adelante su “misión” consistirá en convencer a las autoridades francesas, con la ayuda de Unesco, para que el Pangol, testigo de la historia del clan y del alma de los antepasados, vuelva a Khalambass y siga protegiéndolo.
Texto completo: El Silencio del Totem-Echeverría
Ramón Echeverría p.b. / Pamplona 5 de octubre 2020