El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas adoptó este miércoles una resolución en la que hace eco del llamado del Secretario General a un alto el fuego mundial que permita combatir la pandemia de COVID-19, que ya ha infectado a más de diez millones de personas y causado más de medio millón de decesos.
En el texto aceptado por unanimidad, los quince integrantes del órgano de paz y seguridad exigieron “un cese general e inmediato de las hostilidades en todas las situaciones”.
También expresó su apoyo a los esfuerzos de António Guterres, quien solicitó por primera vez ese cese del fuego el 23 de marzo pasado.
La pandemia pone en peligro la paz
El alcance sin precedentes de la pandemia de coronavirus «puede poner en peligro el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales», señala el documento, y agrega que también podría retrasar la consolidación de la paz y los avances en el desarrollo en los países que salen de un conflicto.