A la Iglesia están llamados todos, hace una invitación a la humanidad a recibir el mensaje del Concilio, ninguno está excluido»
| RD/Aica
El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea, compartió su reflexión desde la ciudad del Vaticano, donde participa de la Asamblea General Ordinaria del Sínodo sobre la Sinodalidad junto con otros cuatro obispos argentinos: cardenal Ángel Rossi SJ (Córdoba), monseñor Marcelo Colombo (Mendoza), monseñor Carlos Azpiroz Costa OFMCap (Bahía Blanca) y monseñor Dante Braida (La Rioja).
“Este año se celebraron 60 años de la elección de san Pablo VI como obispo de Roma, como papa de la Iglesia Católica; y a mí me gustaría hacer alguna relación entre el final del Concilio Vaticano II, la persona de Pablo VI y este momento que nosotros estamos viviendo”, presentó, y puntualizó: “En primer lugar, san Pablo VI clausura el Concilio haciendo una gran profesión por parte de la Iglesia de amor a la humanidad y de respeto por la dignidad de cada persona”.
“Dice que el Concilio que ha sido fundamentalmente pastoral y tiene como función que la Iglesia sirva a la persona, sirva a la humanidad. En el discurso de clausura, nos dice que el Concilio se ha dirigido al hombre bajo sus innumerables apariencias, al hombre que ríe y que llora, al hombre que es sagrado por la inocencia de su infancia, por el misterio de su pobreza y por la piedad de su dolor, y culmina en el saludo final diciendo que la Iglesia está abierta para todos. A la Iglesia están llamados todos, hace una invitación a la humanidad a recibir el mensaje del Concilio, ninguno está excluido”., subrayó.
El obispo de San Isidro trazó un paralelismo “entre ese lenguaje pastoral del Concilio que sirve al hombre y este tiempo que estamos viviendo, en el que el Santo Padre continuamente nos recalca que la Iglesia es para todos, que estamos llamados a incluir a todos y a que nadie quede fuera; esta concepción de la Iglesia al servicio de la humanidad”.
Asimismo, consideró que “otro punto de contacto es la concepción del diálogo de Pablo VI”.