| Víctor Codina sj
Afortunadamente, junto a los terroríficos y casi morbosos noticiarios televisivos sobre la pandemia, aparecen otras voces alternativas, positivas y esperanzadoras.
Algunos recurren a la historia para recordarnos que la humanidad ha pasado y superado otros momentos de pestes y pandemias, como las de la Edad media y la de 1918, después de la primera guerra mundial. Otros se asombran de la postura unitaria europea contra el virus, cuando hasta ahora discrepaban sobre el cambio climático, los inmigrantes y el armamentismo, seguramente porque esta pandemia rompe fronteras y afecta a los intereses de los poderosos. Ahora a los europeos les toca sufrir algo de lo que padecen los refugiados e inmigrantes que no pueden cruzar fronteras.
Hay humanistas que señalan que esta crisis es una especie de “cuaresma secular” que nos concentra en los valores esenciales, como la vida, el amor y la solidaridad, y nos obliga a relativizar muchas cosas que hasta ahora creíamos indispensables e intocables. De repente, baja la contaminación atmosférica y el frenético ritmo de vida consumista que hasta ahora no queríamos cambiar.
(…)
Acabemos con un salmo de confianza que la Iglesia nos propone los domingos en la hora litúrgica de las Completas, para antes de ir a dormir:
“Tú que vives bajo el amparo del Altísimo y pasas la noche bajo la sombra del Todopoderoso, di al Señor: refugio, baluarte mío, mi Dios en quien confío.
Pues él te libra de la red del cazador, de la peste funesta: con sus plumas te protege, bajo sus alas hallas refugio: escudo es su fidelidad.
No temerás el terror de la noche, ni la saeta que vuela de día, ni la peste que avanza en las tinieblas, ni el azote que devasta a mediodía” (Salmo 90,2-7).
Para seguir leyendo: https://www.religiondigital.org/opinion/Victor-Codina-Dios-pandemia-milagros-coronavirus-peste-mal-Jesus_0_2215578438.html
Otros temas en la misma línea para nuestra reflexión personal y, porqué no, comunitaria:
1.- «Religión y Evangelio son medios o caminos opuestos para buscar a Dios». José María Castillo: «Ha tenido que venir el coronavirus, para que la gente caiga en la cuenta de la diferencia entre religión y evangelio».
2.- «No olvidemos que la UE era un proyecto de paz». Cardenal Jean-Claude Hollerich: «Si nos detenemos en los miedos no haremos nunca nada».