António Guterres advierte que más de cuatro millones de niñas “corren el riesgo de ser sometidas a este acto de violencia de género” durante este año e insta a los hombres a alzar su voz contra este “acto de violencia de género”.
La mutilación genital femenina «es una forma repulsiva de atentar contra los derechos humanos fundamentales», afirmó este lunes el Secretario General de la ONU, con motivo del Día Internacional de Tolerancia Cero contra esta lacra, que sigue amenazando a nada menos que de 4,2 millones de niñas.
António Guterres afirmó que la práctica de la ablación genital, una costumbre que prevalece en algunas culturas desde hace más de mil años, daña de por vida tanto la salud física como la mental de mujeres y niñas y representa “una de las manifestaciones más atroces del patriarcado que reina en nuestro mundo.”
El Secretario General cifró en más de cuatro millones el número de niñas que este año “corren el riesgo de ser sometidas a este acto de violencia de género” y pidió una mayor movilización para eliminar la mutilación genital femenina para 2030, una de las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, tomando las correspondientes medidas para lograrlo.
“La mutilación genital femenina tiene su origen en las mismas desigualdades de género y complejas normas sociales que limitan la participación y el liderazgo de las mujeres y que restringen su acceso a la educación y al empleo. Esta discriminación perjudica a toda la sociedad en su conjunto, y urge que todos trabajemos para ponerle fin”, solicitó.
Por ello, afirmó que los hombres y los niños —hermanos, padres, trabajadores de la salud, docentes y dirigentes tradicionales— pueden convertirse en “grandes aliados para acabar con esta lacra”, tal y como indica claramente en el lema de este año.