BULAWAYO, Zimbabue – A medida que se acercan las elecciones presidenciales y legislativas en Zimbabue, que tendrán lugar en julio y agosto, los defensores de la libertad de prensa expresan su preocupación por las estrictas condiciones impuestas por el gobierno para informar durante el proceso.
Desde las exorbitantes tasas de inscripción para cubrir los tan esperados comicios hasta el acoso físico a los periodistas que cubren los mítines del partido gobernante, los profesionales de los medios de comunicación denuncian una escalada de los intentos de amordazar la libertad de prensa, creando condiciones hostiles para informar sobre las elecciones.
Las elecciones nacionales de Zimbabue tienen un largo historial de reavivamiento y escalada de la hostilidad hacia la prensa independiente, con los periodistas de medios de comunicación privados especialmente en el punto de mira de activistas políticos y miembros de las fuerzas de seguridad.
En la convocatoria a las urnas se elegirá al próximo presidente, con un sistema de doble vuelta, así como los 270 miembros de la Asamblea Nacional y los 80 integrantes del Senado.
En los últimos meses, periodistas independientes han sufrido agresiones físicas por parte de la gobernante Unión Nacional Africana de Zimbabue (Zanu-PF), acusados de informar negativamente sobre el gobierno del presidente Emmerson Manangagwa.
A estos periodistas -algunos de ellos trabajadores en pequeñas empresas de nueva creación, medios de comunicación privados o agencias de noticias internacionales- se les ha prohibido cubrir los mítines políticos del partido gobernante.
Mientras, a sus colegas de los medios de comunicación controlados por el Estado se les ha permitido el libre acceso, lo que ha suscitado la preocupación de los defensores de la libertad de prensa por el acceso a la información de los votantes.
La polarización de los medios de comunicación también ha provocado represalias, como la prohibición a los medios estatales de cubrir los mítines de la opositora Coalición de Ciudadanos por el Cambio (CCC).
La CCC, la principal fuerza de oposición de Zimbabue, favorita según las encuestas para desbancar al partido gobernante, acusa a los medios de comunicación estatales de realizar una cobertura sesgada y hostil, al tiempo que actúan como brazo propagandístico del partido gobernante.
Sin embargo, altos directivos de medios como la Zimbabwe Broadcasting Corporation (ZBC) y The Herald, diario nacional controlado por el gobierno, han rechazado estas acusaciones por infundadas.