El presidente de los obispos alemanes responde a 70 prelados tradicionalistas
Fueron apenas 70 obispos, en su mayor parte africanos y estadounidenses (cunas de la oposición a las reformas de Francisco), y cuatro cardenales: Pell, Arinze, Napier y Burke, los que han escrito una carta contra el Camino Sinodal alemán, que consideran puede traer un “cisma inminente”.
Los firmantes, entre los que por el momento no hay ningún español, se han encontrado con la rotunda respuesta del presidente del episcopado alemán, Georg Batzing, quien considera que el escrito “contiene acusaciones sin fundamento” y no entra en las preocupaciones reales que se están planteando en el ‘cónclave’ alemán.
En la carta, dirigida el arzobispo de Denver, Samuel Aquila, firmante principal de la misma, Batzing critica los “adornos eufemísticos” empleados por los críticos para evitar hablar “del poder y del abuso de poder en la Iglesia”.
Frente a ello, el obispo de Limburg defiende el camino sinodal como un modo de “enfrentar las causas sistémicas de los abusos y sus encubrimientos” para lograr que la Iglesia sea un lugar “creíble para el anuncio de la buena noticia”, y pide a los 70 obispos que “enfrenten la cuestión del abuso como Iglesia y saquen consecuencias para sus estructuras”.