La actual crisis de biodiversidad, consecuencia de alteraciones derivadas de la acción humana, es un fenómeno global que está generando pérdidas de especies sin precedentes. Recientemente, un informe publicado por las Naciones Unidas estima que hasta un millón de especies de plantas y animales –el 11,5 % de la biodiversidad global– están actualmente en peligro de extinción.
Dicha pérdida de biodiversidad tiene especial relevancia para el funcionamiento de los ecosistemas. Múltiples evidencias constatan que existe una relación directa entre la diversidad de los ecosistemas y su capacidad para hacer frente a alteraciones derivadas por la pérdida del hábitat y el cambio climático.