NACIONES UNIDAS – La parálisis general de 21 meses, provocada por la pandemia de covid-19, tuvo un impacto destructivo en la economía mundial, se cobró más de 5,2 millones de vidas, desestabilizó a los gobiernos y cambió radicalmente los estilos de vida en todo el mundo.
Pero la pandemia también ha socavado el cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), establecidos por la comunidad mundial en el marco de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), incluido su ambiciosa meta de de erradicar la pobreza extrema y el hambre para 2030.
El mundo «se enfrenta a un reto como nunca antes», asegura con dramatismo el secretario general de la ONU, António Guterres, pero los ODS ofrecen una hoja de ruta para volver a la senda correcta.
Guterres destacó la importancia de una recuperación mundial equitativa e inclusiva, pidiendo a la gente de todo el mundo, incluidas las regiones del Sur en desarrollo: Asia, África y América Latina, «que trabajen con sus gobiernos para poner a las personas en primer lugar en sus presupuestos y planes de recuperación».






