En su mensaje para el Día Mundial de los Refugiados, António Guterres pidió a los países de acogida que doten a estas personas de las oportunidades necesarias ya que aportan a sus comunidades de acogida una “nueva vida, prosperidad y una rica diversidad cultural”.
El titular de la ONU afirmó que los refugiados merecen “oportunidades para sanar, aprender, trabajar y prosperar. Oportunidades para volver a su lugar de origen si así lo deciden, o para reconstruir sus vidas en otro lugar, con seguridad y dignidad”.
Côte d’Ivoire un ejemplo de retorno voluntario de refugiados
Por su parte, el Alto Comisionado de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, recordó que el número de personas forzadas a abandonar sus hogares ya supera los cien millones, “algo que parecía inimaginable”, y mostró su preocupación por la ausencia de respuestas a esta creciente tendencia.
“La falta de soluciones sigue creciendo conforme el número de personas forzadas a huir supera al de personas que pueden retornar a casa, reasentarse en un tercer país o integrarse por completo al que les ha dado acogida. En otras palabras, el desplazamiento forzado está superando a la respuesta que se da a las personas que huyen”.
Para remediar esta situación, Grandi pidió a los líderes mundiales que aúnen esfuerzos en la construcción de la paz y que acaben con la complicada situación que sufren las personas desplazadas “mediante soluciones humanas y duraderas”.
Como ejemplo a seguir, el Alto Comisionado destacó el caso de Côte d’Ivoire, adonde han retornado voluntariamente más de 310.000 refugiados durante la última década. La nación africana vivió un duro conflicto que obligó a cientos de miles personas a huir.






