9 de enero de 2024 / 01:30 PM
Más de 6 millones de fieles participaron este martes 9 de enero en la procesión del Nazareno Negro en Manila, la devoción más grande e importante de Filipinas, el país con más católicos del continente asiático.
Este año la procesión tuvo una importancia mayor a la habitual, dado que fue la primera que se realizó normalmente tras las restricciones por la pandemia del COVID-19, entre 2021 y 2023.
“Estoy muy contento de que el antiguo sistema haya vuelto y podamos hacer esto de nuevo”, declaró Jonathan Rancho a Reuters. El hombre de 52 años viajó con su esposa y sus dos hijos desde la provincia de Bulacan hasta Manila para estar en la procesión y rogarle al Señor que le vaya bien en el trabajo.