La Natividad de María, una fiesta discreta

En la Iglesia católica celebramos el nacimiento de María, la Madre Dios, el 8 de septiembre.

«Es una fiesta silenciosa»

¿Cuál es su origen? Es difícil separar la historia de la leyenda, porque la Biblia no dice nada al respecto. Los evangelios apócrifos nos dicen que los padres de María son Ana y Joaquín.

Hija de Israel, María es una de nosotros, hecha de la misma pasta humana que nosotros. Como judía, espera la promesa, la llegada del Mesías. ¿Quién iba a sospechar que esa niña sería un día la Madre de Dios?

Solo Dios, que lo dirige todo, conoce el secreto de los corazones. Estaba preparando en secreto al que acogería a su Hijo, Jesús, el Cristo. Formó parte de un proceso de alianza, iniciado desde el principio de los tiempos, cuya actualidad no pasa de moda, porque se trata de nosotros: la revelación de su amor infinito por cada ser humano.

Poesía de sor Marie-Pierre Faure

Dios se acercó como el fruto de un largo deseo,

Como el sello de una alianza de la que Él era el futuro.

Respondió a la esperanza de un pueblo en marcha hacia Él.

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