Arranca el torneo de selecciones más importante del fútbol africano con la pentacampeona Camerún como anfitriona. Osimhen es la única gran estrella que es baja.
La Copa de África de Naciones (CAN) por fin regresa a Camerún. Eso sí, dos años y medio más tarde de lo previsto. Parte por culpa de la Administración camerunesa, evitable, y otra parte por culpa del coronavirus, justificada. Y es que el país del Golfo de Guinea había sido elegido como sede oficial del torneo para la edición de 2019, pero debido a la falta de previsión y a los retrasos que se produjeron en las obras e infraestructuras para albergar la competición, la Confederación Africana de Fútbol (CAF) decidió llevarse la CAN a Egipto unos meses antes de que esta comenzara. En compensación, se le otorgó a Camerún ser la anfitriona de la CAN 2021, movida de junio a enero para huir de las altas temperaturas que se dan en verano en esa región africana, pero entonces surgió la pandemia de la COVID-19, que obligó a rehacer todo el calendario futbolístico, y Camerún tuvo que esperar otro año más para ser el gran reino del fútbol africano.