II. África Occidental en 2023

La expansión del terrorismo yihadista en el Sahel, los resultados de las elecciones en Nigeria, Sierra Leona y Liberia, y el freno a los golpes de Estado son algunos de los retos que enfrentará la región de África Occidental en 2023.

Un año clave para las urnas

Más de una docena de países africanos tienen previsto celebrar elecciones en 2023 y la mitad se concentran en la región de África Occidental. Unos eventos electorales que tendrán un impacto significativo y que podrán traer volatilidad además de un alto riesgo de protestas políticas, huelgas y manifestaciones.

Nigeria se prepara para celebrar el próximo 25 de febrero sus séptimas elecciones generales consecutivas desde que el país recuperó la democracia en 1999, el periodo democrático más largo en su historia. El actual presidente, Muhammadu Buhari, no volverá a pronunciar el mensaje de Año Nuevo o el discurso del Día de la Independencia.

Dos décadas después de su primera candidatura y tras dos mandatos en el cargo, Buhari abandonará la política y dejará con su salida un país con el reto más inmediato del impacto inflación en la inseguridad alimentaria. Alrededor de 25 millones de personas podrían pasar hambre en 2023 debido al encarecimiento del precio de los alimentos y la incesante violencia yihadista de Boko Haram en los estados nororientales de Borno, Adamawa y Yobe.

“Debemos tener en cuenta que Nigeria tiene 213 millones de habitantes con enormes conflictos y un gran impacto desestabilizador en el conjunto de la región de África occidental”, asegura Oscar Mateos, doctor en Relaciones Internacionales, coordinador del centro GlobalCodes y profesor de Blanquerna Universitad Ramón Llull.

El investigador asegura que las elecciones generales de Nigeria serán el acontecimiento del próximo año en la región. Mateos avisa que las dinámicas al norte del país con Boko Haram no serán la única herramienta de desestabilidad, sino también las nuevas aspiraciones secesionistas de los grupos de Biafra o los enfrentamientos locales.

Ganar las elecciones en Nigeria no será tarea fácil. El país está compuesto por 36 estados y un territorio de capital federal. La ley en Nigeria establece que, para ganar unas elecciones presidenciales, el candidato debe obtener la mayoría de los votos y al menos el 25% de los emitidos en 24 de los 36 estados. Tres candidatos emergen con opciones: Bola Tinubu, del partido Congreso de Todos los Progresistas al que pertenece el actual presidente Buhari; Atiku Abubakar, del Partido Democrático Popular y principal partido de la oposición; y Peter Obi, del desconocido Partido Laborista. Este último es el favorito en las encuestas desafiando la tradición de voto religioso y por etnias.

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