

“Es necesario atestiguar que el derecho siempre significa solidaridad”
“El anuncio del Evangelio en una sociedad que cambia rápidamente requiere la valentía de escuchar la realidad, para educar las conciencias a pensar de manera diferente, en discontinuidad con el pasado”. Si esperaban un gesto, una palabra del Papa, desmarcándose de una visión rigorista de la moral, como el impuesto por el Responsum de Doctrina de la Fe, aquí lo tienen.
Medido, y pretendidamente firmado con fecha de hoy (este tipo de cartas suelen enviarse con días de antelación), Francisco ha utilizado el 150 aniversario de la proclamación de San Alfonso María de Ligorio como Doctor de la Iglesia para recordar, de la mano de ‘Evangeli Gaudium’ que “la teología moral no puede reflexionar sólo sobre la formulación de principios, de normas, sino que necesita hacerse cargo propositivamente de la realidad que supera cualquier idea”. Blanco y en botella.
(…)
Para Francisco, “la propuesta teológica de Alfonso parte de la escucha y la acogida de la fragilidad de los hombres y mujeres más abandonados espiritualmente”. “El Santo Doctor, formado en una rigurosa mentalidad moral, se convirtió a la ‘benignidad’ escuchando la realidad”, destacó el Papa, quien animó, a imagen de lo sucedido con Ligorio, a una “progresiva conversión hacia una pastoral decididamente misionera, capaz de estar cerca de la gente, de saber acompañar sus pasos, de compartir concretamente su vida incluso en medio de grandes limitaciones y desafíos”.
Del rigorismo a la misericordia
Eso “llevó a Alfonso a revisar, no sin dificultad, incluso el enfoque teológico y jurídico que había recibido en los años de su formación: marcado inicialmente por un cierto rigorismo, se transformó luego en un enfoque misericordioso, un dinamismo evangelizador capaz de actuar por atracción”.