El Padre Gordon Paul Rees, director nacional de las Obras Misionales Pontificias (OPM) en Sudáfrica, testifica a la Agencia Fides de la profunda esperanza que emerge de esta ardua misión dirigida por la Iglesia en su país.
Profundamente conmocionado por las consecuencias causadas por la epidemia, la población de Sudáfrica está debilitada y muchas personas ya no pueden permitirse comer adecuadamente, dice el Padre Gordon Paul Rees, Director Nacional de OPM en Sudáfrica, en una entrevista con la agencia Fides . Pero para el misionero, lo más grave en este contexto de emergencia sigue siendo las prohibiciones hechas por el gobierno: está estrictamente prohibido que las organizaciones benéficas católicas distribuyan paquetes de alimentos a los más necesitados. Un techo.
