Mario Grech: «Es necesario crear lugares donde todos puedan hablar y ser realmente escuchados»
Las iglesias europeas ya se encuentran en Praga, participando de la fase continental del Sínodo de la sinodalidad. Será la primera ocasión en la que católicos de todo el Viejo Continente confrontarán las ideas, propuestas y desafíos planteados en los últimos meses, que no han estado exentos de problemas. El más visible es el del ‘Camino Sinodal Alemán’ cuyos responsables, lejos de amilanarse ante las recientes polémicos, acuden a la capital checa para explicarse.
Y lo hicieron. Tanto el presidente de la Conferencia Episcopal, Georg Bätzing, como la presidenta del Comité Central de los Católicos Alemanes (ZdK), Irme Stetter-Karp, plantearon que las iglesias en Europa «necesitamos respuestas convincentes sobre cómo podemos redescubrir y proclamar el Evangelio en estas situaciones. Pero no debemos tomar caminos especiales», informa Katholische.
Bätzing aseguró «comprender las preocupaciones» planteadas por algunos sectores, y se comprometió a incorporarlas en el «proceso mundial de renovación de la Iglesia». Stetter-Karp, por su parte, clamó por «una respuesta que combine realismo con fe, esperanza y amor«, y se mostró convencida de que «podemos reflexionar sobre los carismas, los dones, los servicios y las energías del Espíritu que todos los creyentes aportan a la Iglesia».
«Necesitamos una aclaración de lo que entendemos por sinodalidad: en ver, en juzgar y en actuar. El sacerdocio común de todos no es contradictorio con el sacerdocio de servicio», subrayó.