abril 23, 2020
El amor de Cristo ha reunido a un gran número de discípulos para llegar a ser una sola cosa, a fin de que en el Espíritu, como Él y gracias a Él, pudieran responder al amor del Padre, a lo largo de los siglos, amándolo.
¡Qué reto tan hermoso es construir una comunidad verdaderamente fundamentada en criterios evangélicos, que reflejen una vida auténticamente fraterna, humilde, sencilla y libre, al estilo de la familia de Nazareth. Y al mismo tiempo, acogiendo la realidad de nuestra miseria y de nuestras limitaciones, que es normal que estén presentes, pero con la ayuda amorosa de las demás, vamos haciendo verdad en nuestra vida, y nos ayudamos a crecer juntas, como verdaderas hermanas, ¡poniendo nuestra mirada en el Cielo!
Se crece en vida fraterna:
1. Sabiéndonos que todas hemos sido llamadas por Dios a una vocación sublime: la de estar con Él y permanecer en Él para siempre. Nosotras no nos hemos elegido, sino que hemos sido convocadas por Él, para vivir juntas en comunidad en la vida religiosa.
Para seguir leyendo: https://institutohumanitate.org/blog/index.php/2020/04/23/6-claves-para-crecer-en-la-vida-fraterna/