GINEBRA – La lucha contra la malaria o paludismo ha podido mantenerse el último año en todo el mundo sin contratiempos adicionales a pesar de la covid-19, según datos publicados este jueves 8 por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, dijo que “tras un marcado aumento en el número de casos de paludismo y de defunciones debidas a esta enfermedad en el primer año de la pandemia, los países afectados por el paludismo redoblaron sus esfuerzos y pudieron mitigar las peores consecuencias”.
Los nuevos datos publicados por la OMS muestran que países de todo el mundo lograron en gran medida evitar que los servicios de prevención, detección y tratamiento del paludismo sufrieran contratiempos adicionales en 2021.
Según la edición de este año del Informe Mundial sobre el Paludismo, en 2021 murieron por esa enfermedad en todo el mundo 619 000 personas, en comparación con las 625 000 víctimas en 2020, el primer año bajo la covid.
En 2019, antes de que estallara la pandemia, las defunciones fueron 568 000.
Los casos de paludismo siguieron aumentando entre 2020 y 2021, aunque a un ritmo menor que entre 2019 y 2020. El cómputo mundial de casos de paludismo alcanzó en 2021 los 247 millones, 245 millones en 2020 y 232 millones en 2019.
Tedros dijo que “son numerosos los desafíos a los que nos enfrentamos, pero hay muchas razones para la esperanza. Con el fortalecimiento de la respuesta, y gracias a haber comprendido y mitigado los riesgos, creado resiliencia y acelerado la investigación, nos sobran los motivos para soñar con un futuro libre de paludismo”.
El paludismo es una enfermedad febril aguda causada por parásitos del género Plasmodium, que se transmiten a las personas por la picadura de hembras infectadas del género de mosquito Anopheles.






