Jubileo Sacerdotal en Burkina / Níger

Los sacerdotes de la Conferencia Episcopal de Burkina-Níger han dado gloria a Dios por los 75 años de sacerdocio, el sábado 6 de mayo 2017 en el santuario de nuestra Señora de Yagma. Burkina Faso. Durante estos años 1303 sacerdotes han sido ordenados, de los cuales 135 ya se encuentran en las manos de Dios.

De todos los rincones del país, obispos, sacerdotes y religiosas, se reunieron al pie del santuario mariano para dar gracias a Dios por el jubileo sacerdotal. Con una celebración eucarística hermosa, marcada por la homilía, los cantos y los bailes, se dio fin a la celebración del jubileo.

Cardenal Philippe Ouédraogo

«75 años no son 75 días. Esto muestra la importancia del evento que hemos celebrado. Fue el 2 de mayo de1942 que nuestros primeros tres sacerdotes fueron ordenados: Joseph Ouédraogo, Zacharie Nikiema, Paul Zoungrana de Oagadougou. Es un evento que hemos querido conmemorar dando gracias al Señor, una celebración de acción de gracias, de esperanza», dice el Cardenal Philippe Ouédraogo.

A los sacerdotes dijo: «Amaos los unos a los otros como Cristo nos amó. Permanecer en el amor de Cristo, que es nuestro maestro, es centrarse en Él en una imitación radical de vida. Darse al servicio de los demás es el ancla necesaria e indispensable para nuestro ministerio sacerdotal. Para la vida personal y pastoral en camino hacia el centenario, dos aspectos me parecen importantes y resumen lo esencial: la santidad y la misión. La vocación de los sacerdotes es una vocación a la perfección de la santidad. Para lograr mejor esta vocación, común a todos los bautizados, este aniversario nos da la oportunidad de entrar en una dinámica de conversión profunda del corazón. La respuesta al desafío de la santidad pasa por una profunda intimidad con Dios a través de la oración, la meditación de la Palabra de Dios y la Eucaristía celebrada y adorada. Todo esto es una fuente de fecundidad de nuestra vida sacerdotal (pobreza, castidad, obediencia, sirviendo generosa y desinteresada). Con respecto al segundo aspecto que es la misión, es innegable que la santidad del sacerdote lleva a cabo su misión de forma natural”. A los cristianos el Cardenal ha invitado a orar constantemente por los sacerdotes.

El Cardenal señaló que el jubileo les ha permitido escudriñar bien el pasado y prepararse mejor para el futuro, para alentar a los demás a la oración. Para él, el reto de la santidad sigue siendo un desafío permanente para todos, tanto sacerdotes como bautizados; lo mismo respecto al reto de la misión. «Todo bautizado debe ser misionero y participar en la misión», dijo.

Don Anselme Zoungrana, Secretario General de la Comisión Episcopal del Clero, afirma que las recomendaciones y resoluciones de este jubileo están en la línea de la santidad, la misión, la comunión y una mejor sinergia entre sacerdotes, obispos, religiosos y el pueblo de Dios, para que juntos puedan caminar hacia adelante. También, ellas toman en cuenta la formación de los sacerdotes: la formación como una manera de reencontrar a Jesucristo y vivir en mayor santidad. Y como una oportunidad, desde el seminario, en la cual unos y otros pueden darse cuenta de la importancia de estar juntos y tener un ministerio común.

«Después de 75 años, nos faltaba reflexionar para ver los desafíos que enfrentamos hoy y juntos ver la urgencia de la cuestión. La misión sigue siendo la misma: es Jesucristo, que nos envía a anunciar que ha resucitado, bautizar, y trabajar para que todos se conviertan, empezando con nosotros. 75 años, era bueno que nos detengamos para hacer una evaluación y reiniciar nuestro trabajo «, dijo en conclusión.

Fuente: Rita Bancé/Ouédraogo – lefaso.net