«Un papa emigrante. Signos y palabras conjugados»
| Jose Luis Pinilla Martin s.j.
Nuestro papa es un emigrante venido del fin del mundo. Un Papa hijo de emigrantes italianos; de segunda generación, y “retornado a Italia, país de origen de la familia –casi- contra su voluntad”. La huella emigrante la tiene pues en su “ADN “ y desde luego le sale por los poros con un lenguaje y unos signos rotundos y significativos.
Pero también muchos lo han visto como un peligro. Sobre todo, los que no han sabido descubrir en sus gestos y sus palabras, palabras rotundas y gestos sencillos, el olor fresco del evangelio en continuidad con los papas anteriores y con los mejores hijos de la Iglesia.
No quiero hacer un relato pormenorizado de la década del papa que otros lo harán mucho mejor. La sintetizo en dos momentos como homenaje y agradecimiento por su vida que Dios guarde muchos años. Tras la petición cordial que me hace Religión Digital
Uno con el recordatorio público de uno de sus primeros y principales momentos donde se concentraron sus signos y sus palabras. Su visita a la isla de Lampedusa. Y el otro como reliquia personal que guardo de mis encuentros con él mismo.